martes, 21 de julio de 2015

LA DAMA DE AZUL

                                    Resultado de imagen de la dama de azul

Sor María de Jesús de Agreda, tenía un gran celo por “salvar almas para el Señor”; desde su más tierna edad, Dios le concedió tener una visión del alma en gracia santificante y del alma en pecado mortal que marcó totalmente su vida, desde ese momento María Coronel Arana ya no sería la misma. A partir de allí, su espíritu se encumbraría a buscar sólo a satisfacer a su Amado, a entregarse por entera a Él.

El Señor le favoreció con fenómenos exteriores, pero todos estos fenómenos místicos extraordinarios cesaron, para dar paso a una concentración de lo sobrenatural en su interior, el cual se manifestó con el fenómeno único de la bilocación que le hacía actuar a distancia de miles de kilómetros en las tierras americanas de Nuevo México. Era el año 1622. Sor María tenía sólo 20 años.

La bilocación que trasladó a Sor María desde su retiro de Ágreda sobre el Atlántico hasta América fue en su tiempo algo que causó el más grande estupor, no sólo en España sino en las mismas Indias, donde ha perdurado hasta nuestros días la fama de la dama azul del Oeste que evangelizara vasta zonas de Nuevo México.

Los obstáculos a la acción de los misioneros eran duros. Ante todo la hostilidad de las tribus indígenas, luego la dificultad de las lenguas autóctonas- diferentes y extrañas en su estructura-, las grandes distancias, etc. Es cuando se inician las inexplicables actuaciones de la legendaria “dama de azul” que prepara a los indios a la recepción del bautismo.

La Dama de Azul sigue viva en el corazón de los americanos, quienes le profesan una gran devoción, no por lo “extraordinario o sobrenatural” de sus bilocaciones, sino por el amor con que anunció y sigue anunciando el Evangelio, “las maravillas que Dios hace con los hombres”(Sal 106).

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario