Por amor de Dios Padre, Tú, San José, has sido
llamado padre de Jesús y, unido a la maternidad espiritual de María, ahora
también padre nuestro. A ti consagramos nuestra vida y la misión que Dios nos
ha encomendado. Te pedimos que intercedas por nosotros ante el Señor, que
intercedas por la Santa Iglesia para su salvación, que intercedas en nuestra
oración y la lleves a Dios.
Tú, esposo de María, casto, justo, prudente y
humilde, haz que estas virtudes, en ti gloriosas, afloren en nuestro espíritu y,
para gloria de Dios, en el mundo.
Haznos dulces y dóciles, tiernos y mansos con
nuestro prójimo, especialmente con nuestros padres, hijos, familia y hermanos,
no desde nuestra pequeñez sino desde Dios, dejando que Él sea en nosotros y
nosotros en Él, que todopoderoso es. Amado San José enséñanos a desaparecer,
como Tú que estás presente pero en Ti es sólo el Espíritu Divino el que
permanece y Tú desapareces en el silencio del amor.
Ruega para que en la presencia del Espíritu
Santo, reconozcamos que sin Dios nada somos y nada podemos; ruega para que Dios
obre en nuestro corazón como en el tuyo; ruega para que desaparezca nuestra
pequeñez y aparezca tu grandeza, al reconocer nuestra debilidad en presencia de
Su Amor. Por Jesucristo Nuestro Señor, Amén.
Gloria al Padre, y al Hijo y al Espíritu
Santo; como era en el principio ahora y siempre por los siglos de los siglos
Amén
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